A no ser que acabes de regresar de Marte, habrás oído más de una vez el término “superalimento”. Aunque no existe una definición científica sobre los mismos, se podría decir que son aquellos alimentos que destacan por sus grandes propiedades nutricionales y, por tanto, por los múltiples beneficios que su ingesta habitual aporta a nuestra salud. Esta definición se corresponde con las variedades que conforman la gama Vitalfood de Eurogarden y de la que hoy vamos a hablaros. ¡Sigue lenendo!

Para sacar esta gama de semillas, en Eurogarden hemos hecho nuestra propia selección de 10 alimentos 100% naturales. Para ello, además de fijarnos en sus altas cantidades de minerales y nutrientes esenciales, también hemos tenido en cuenta el que sean alimentos, generalmente, más difíciles de adquirir. De este modo, al cultivarlos tú mismo, podrás tenerlos siempre disponibles para tu disfrute.

¿Quieres conocer nuestra selección? ¡Sigue leyendo y descubre los primeros cinco superalimentos de nuestra colección Vitalfood!

5 superalimentos Vitalfood para sembrar en tu huerto

Los cinco superalimentos de nuestra gama Vitalfood de los que hoy vamos a hablar presentan algunas similitudes que les conceden esta etiqueta de alimentos top. Por ejemplo, sus importantes aportes nutricionales: fibra, vitaminas, minerales… Además, todos ellos son bajos en calorías y saciantes, lo que los convierte en los mejores aliados para cualquier dieta saludable. ¡Descúbrelos!vitalfood

1. Alholva. La alholva o fenogreco es una planta anual que pertenece a la familia de las fabáceas. Se caracteriza por su fuerte aroma y sabor amargo y porque es un cultivo que puedes tener listo en pocas semanas desde su siembra. Puede cultivarse con dos objetivos diferentes, para obtener semillas/granos o brotes.
Ambas formas tienen propiedades similares y el mismo sabor intenso que nos ayudará a darle un toque especial a nuestros platos. Las semillas se conservan secas durante mucho tiempo, pero su cultivo es más largo y ocupa más espacio. Mientras que los brotes se consumen frescos y su cultivo es más sencillo porque se puede cosechar desde el primer mes y ocupa menos espacio.

Para cultivar los granos, entiérralos a una profundidad de 0,5 centímetros y deja 25 centímetros entre líneas y plantas. En el caso de los brotes, espolvorea las semillas por toda la superficie de cultivo para repartirlas de forma homogénea. No te preocupes por la separación entre plantas ya que la alholva puede crecer en condiciones bastante apretadas. En ambos, casos, es importante que se ubiquen en una zona en semisombra y regar con regularidad para que la tierra esté siempre húmeda.

En lo que respecta a su cosecha, en el caso de los granos, podrás hacerlo pasados entre 90 y 100 días, cuando las vainas maduren. Sabrás que están listas porque se vuelven de un color amarillento. Posteriormente, deja que las semillas se sequen al sol para conservarlas. Los brotes, por su parte, estarán listos para su cosecha pasadas entre 3 y 4 semanas de su siembra. Sabrás que es su momento cuando las plántulas tengan unos 15 centímetros de altura. Simplemente, corta las hojas por la base del tallo.

2. Brócoli. Completamente asentado en la gastronomía española, el brócoli el es el superalimento por excelencia. Si lo cultivas tú mismo podrás sacar el máximo provecho a sus aportes nutricionales, dado que pierde rápidamente sus propiedades una vez cosechado. 

Lo mejor es sembrarlo en primavera o verano para evitar que la inflorescencia coincida con épocas muy calurosas o con heladas. Entierra las semillas a una profundidad de un centímetro y deja 70 centímetros  entre líneas y 45 entre plantas. Requiere suelos mullidos, abonados, frescos y con humedad regular. 

Por lo tanto, riega de manera abundante y regular, aunque sin llegar a encharcar el suelo, y como es exigente en nitrógeno, prepara el suelo con una buena dosis de compost antes de su siembra o trasplante si siembras en semilleros. En macetas y otros recipientes, necesita un aporte de materia orgánica continuo.

vitalfoodPara la recolección, pasados entre 70 y 100 días desde la siembra, se corta la cabeza central, mientras los brotes aún están firmes y apretados. Haz solo un corte angular para no dañar la planta y que siga produciendo brotes laterales para seguir cosechando.

3. Espelta. Variedad antigua del trigo moderno, fue base de la alimentación humana en el Mediterráneo durante miles de años. Además, tanto nutricional como medioambientalmente, la espelta posee mayores beneficios que el trigo, algo que ya os contamos en un post dedicado a este superalimento.

A la hora de sembrar espelta, debemos de saber que existen diferentes modos de cultivo: puedes cultivar hierba de espelta o cultivarla para obtener grano y preparar tus propias harinas y pastas

Para esto último, es mejor plantarla en mesas de cultivo y cajoneras, sin embargo, para cultivar tu propia hierba de espelta, puedes hacerlo en maceta. Es importante enterrar las semillas a la profundidad adecuada, en este caso unos 0,5 centímetros y deja como mucho 20 centímetros entre líneas y plantas.

La espelta puede soportar climas duros y es más resistente a enfermedades gracias a su cáscara, pero su producción es menor que la del trigo. Precisa de suelos profundos para favorecer sus sistema radicular y con un buen drenaje. 

No necesita que apliquemos abono de manera regular ni grandes cantidades de agua. Estará lista para cosechar cuando el grano esté maduro, alrededor de la octava o décima semana desde su siembra.

4. Kale. El kale es una planta de la familia de las crucíferas, originaria de Asia Menor, que destaca por sus características hojas verdes muy rizadas. 

Se trata de un cultivo sencillo y productivo que al sembrarlo tú mismo, te permitirá cosechar el kale siempre en su mejor momento, es decir, cuando las hojas son menos fibrosas y tienen un sabor más suave. 

Entierra las semillas a una profundidad máxima de un centímetro, dejando una distancia de 70 centímetros entre líneas y 40 entre plantas. Si vas a cultivarlo en una maceta, deberá tener una capacidad de 25 litros de sustrato. 

El kale necesitará un aporte continuo de materia orgánica (cada mes, dos meses como mucho). Es un cultivo típico del otoño y del invierno, que prefiere climas templados y fríos y si bien soporta las heladas, tolera peor el calor y la sequía. 

Le gusta la luz, pero no las temperaturas elevadas. En cuanto al riego, es importante mantener la humedad del sustrato o terreno, pero sin encharcar, ya que podrían pudrirse las raíces.

Podrás recolectar las primeras hojas pasados unos cuatro meses de su siembra, cuando la planta empiece a crear el quinto par de hojas verdaderas o tenga unos 20 centímetros de altura. Cosecha las hojas externas, dejando el punto de crecimiento intacto para ir cosechando a lo largo del tiempo. Si quieres saber más sobre este superalimento, ¡echa un ojo al post que le dedicamos

5. Kohlrabi. El kohlrabi es una verdura también conocida como colirrábano, de textura crujiente y con un ligero sabor dulce. Una de sus características principales es que de él se aprovecha todo, incluidas sus hojas que también son comestibles, como os decíamos en un post anterior

vitalfoodPara disfrutarlo en tu huerto, siembra a mediados o finales del otoño ya que le gustan los climas cálidos o templados. Entierra sus semillas a una profundidad de 1 centímetro y deja 50 centímetros entre líneas y 30 entre plantas. Es un cultivo exigente en agua y nutrientes, por lo que debes de abonar y regar de manera regular para mantener el sustrato o suelo siempre húmedo. 

Puedes comenzar su cosecha pasados dos meses de la siembra. En el caso del kohlrabi es preferible pecar de impaciente que de tardón, ya que si cosechamos demasiado tarde, se volverá leñoso y tendrá mal sabor. Por eso, para saber si está listo fíjate en que el bulbo tenga un tamaño aproximado al de una pelota de tenis. 

¡Esperamos que este post te haya animado a sembrar tus propios superalimentos en casa! Próximamente haremos una segunda parte con otras cinco variedades de nuestra gama Vitalfood.

Para saber más de cada uno de estos cultivos y obtener alguna idea de receta con ellos, echa un vistazo a nuestra Guía Eurogarden Vitalfood. Este documento ha sido elaborado por Marta Rosique (@planteaenverde) y Anina Topala (@greenmamabcn) y para haceros con él tan solo tenéis que comprar cualquier variedad de semillas de nuestra gama Vitalfood en los Centros de Jardinería y tiendas en las que Eurogarden está presente.

Si queréis conocer más consejos sobre siembra y cuidado de otros cultivos, te animamos a navegar por nuestro blog y encontrarás muchos más. También puedes pasarte por nuestro perfil de Instagram para compartir con nosotros tus propias experiencias o las dudas que tengas.