Si te decimos la palabra kokedama puede que no sepas de qué te estamos hablando, pero si te decimos que se trata de una especie de jardín colgante en el que colgamos las plantas sin necesidad de macetas porque la tierra se cubre con musgo, puede ser que ya te suene algo más. ¡Hoy en Eurogarden hablamos de los kokedamas o jardines colgantes!

De origen japonés, la creación de este tipo de jardín se ha popularizado y extendido en los últimos tiempos por el toque original y vistoso que le da al espacio en el que se ubica. Además, se trata de otra manera de aprovechar el espacio en los casos en los que se dispone de poco para cultivar plantas propias, al igual que los jardines verticales o las mesas de cultivo.

Si lo que estás leyendo ha despertado tu interés y te planteas tener tu propio jardín colgante en casa, ¡toma nota!

Guía paso a paso para hacer un jardín colgante o kokedama

Como ya hemos dicho, este tipo de jardín se puede adaptar a cualquier espacio, por pequeño que sea, para darle algo de color y alegría, y no es para nada difícil de crear ni de mantener.

Para poder crearlo, necesitarás:

  • Sustrato
  • Tijeras
  • Hilo
  • Guantes
  • Agua
  • Musgo seco
  • Tantas plantas pequeñas como quieras colgar

jardín colganteAhora veamos los pasos que debemos de seguir para crear nuestro jardín colgante. ¡Toma nota!

1. Para empezar, saca las plántulas o plantas de las macetas en las que estén, procurando retirar la mayor cantidad de tierra posible para dejar tan solo las raíces.

2. Moja la tierra para poder hacer con ella tantas bolas compactas como plantas vayas a colgar y del tamaño que estas necesitan para cubrir sus raíces.

3. Haz un agujero en cada bola y mete dentro las plantas elegidas. Luego, cierra las bolas presionando ligeramente y usando un poco de agua para poder compactarlas mejor.

4. Por último, cubre toda la superficie de cada bola con el musgo seco y cuando esté todo bien cubierto, da varias vueltas a cada bola con el hilo. Cuando hayas acabado, pon ganchos al final de cada hilo para poder colgar tus plantas del techo o de donde desees.

Como consejo extra, te recomendamos que empieces haciendo pocos kokedamas y pequeños, con plantas de pequeño porte, para ir viendo cómo evoluciona antes de combinarlo con kokedamas más grandes y así crear un verdadero jardín colgante.

En cuanto a qué plantas usar, no cabe duda de que algunas son más indicadas para esta técnica que otras, como por ejemplo, los helechos, las hiedras, las cintas o malamadre, los ficus o las suculentas. Sin embargo, puedes probar con otras variedades y por ejemplo, intentar crear tu propio jardín de plantas aromáticas colgantes. ¡Tienes disponibles montones de opciones! Prueba con tus plantas favoritas o echa un vistazo a nuestra amplia gama de semillas para dejar volar tu imaginación y disfrutar de las kokedamas de una forma totalmente diferente e innovadora.

Cuidados necesarios para mantener tu jardín colgante o kokedama

Realmente el jardín colgante no requiere ningún cuidado especial o diferente a cualquier otra planta. Pero hagamos un pequeño repaso de los cuidados básicos necesarios.

  • Luz. Cada planta requiere una mayor o menor cantidad de luz diaria para desarrollarse. Por lo tanto, en este caso, dependerá de la planta que hayas metido en la bola de musgo. Te recomendamos tener en cuenta las características propias de la ubicación en la que vas a colgar las plantas para seleccionar las que quieres que formen parte de tu jardín colgante.
  • Riego. La cantidad y frecuencia del riego de los kokedamas depende de dónde están colgadas las plantas y de la época del año, ya que como en el caso de cualquier otra planta, en los meses de otoño e invierno el riego suele espaciarse más ya que la bola de musgo tarda más en secarse, mientras que en primavera y verano tendrás que regarlas con más frecuencia. En cuanto a la manera de regar los kokedamas, lo puedes hacer de diferentes maneras. Puedes hacerlo por inmersión, es decir, sumerge la bola de musgo en agua hasta que dejen de salir burbujas y luego escurre la bola y vuelve a colocarla en su sitio. Otra opción es la pulverización, es decir, pulveriza agua hacia la bola de musgo hasta que esté bastante húmeda. Como os habréis imaginado con el riego por inmersión conseguimos un mayor grado de humedad, mientras que con la pulverización podemos salir del paso cuándo nuestras plantas colgantes necesitan agua y no tenemos tiempo para sumergirlas.
  • Abonado. Normalmente la aplicación del abono suele hacerse en primavera y verano, pero si observas que la planta deja de creer o que las flores han dejado de aparecer, puedes aplicarle un abono líquido en el riego para impulsar su crecimiento.
  • Por último, es recomendable alejar tu jardín colgante de fuentes de aire y de calor como aires acondicionados, calefacciones y corrientes para evitar que se seque la bola.

jardín colgante

Siguiendo la guía de elaboración del kokedama y los consejos para su cuidado y mantenimiento, ¡podrás disfrutar de un jardín colgante que le dará un estilo diferente a tu hogar y que seguro que te querrán copiar!

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