Se acerca una fecha que prácticamente tod@s aquellos con pareja tienen subrayada en su calendario, ¡San Valentín! Si estáis hartos de regalar año tras año lo mismo a vuestra pareja, desde Eurogarden os proponemos algo diferente, original y muy especial: regalar semillas. ¡Seguid leyendo!

Cada 14 de febrero se celebra este día que homenajea a los enamorados, fecha especial para muchas personas. Pese a la creencia de que su origen tan solo radica en un fin comercial, no es cierto. Se trata de una fecha que se celebra desde hace mucho tiempo.

Varias leyendas dicen que el Día de San Valentín tiene su origen en una festividad de tres días de la Antigua Roma, las Fiestas Lupercales, que marcaba el inicio de la primavera y celebraba la fertilidad. Era una fiesta pagana hasta que en el año 494 después de Cristo el Papa Gelasio I decidió reconvertirla en una festividad católica. Para ello necesitaba asociarla a un santo y escogió a San Valentín.

Aunque existen varias teorías sobre quién fue este mártir, la más extendida es la que se remonta al siglo III en Roma. Un sacerdote llamado Valentín comenzó a casar en secreto a parejas de jóvenes enamorados, prohibido por orden del emperador Claudio II que consideraba que los solteros sin familia eran mejores soldados. San Valentín fue sentenciado a muerte el 14 de febrero del año 270 A.C por desobediencia y rebeldía. A partir de ese día, el sacerdote pasó a ser considerado el patrón de los enamorados y a ser homenajeado en el aniversario de su ejecución.

Sucesos históricos al margen, lo cierto es que los que se animan a celebrarlo con su enamorado/a se preguntan año tras año qué le pueden regalar. El recurso fácil y tradicional es un ramo de flores, pero a veces apetece innovar y regalar algo diferente. ¿Qué os parece cambiar el típico ramo de flores por unas semillas para que vuestra pareja plante y cultive sus propias flores? ¡Le estáis regalando todo un jardín!

Sembrando amor desde la semilla

Con la primavera llamando a nuestra puerta, febrero es un mes estupendo para empezar a sembrar tus propias flores o retomar las tareas del jardín.

Hay muchas variedades cuyo mes propicio de cultivo es éste para poder empezar a darle forma al jardín y recibir la primavera. Entre las múltiples opciones, se encuentran flores tan atractivas como la petunia, el clavel o la caléndula. ¡No dudéis en echar un ojo a nuestro calendario de siembra para descubrir las distintas opciones y sus características!

Si ya habéis elegido qué variedades podrían gustarle a vuestra pareja, es el momento de que leáis una serie de consejos para poder guiarlo y ayudarlo y que le crezcan unas flores bonitas y sanas.

Guía para sembrar tus propias flores paso a paso

  1. El primer paso es decidir dónde sembrar las flores. En un jardín, si se tiene la opción, o bien en jardineras o macetas. En el caso de que sea un jardín, decidir en qué zona en función de las condiciones climáticas que más beneficien a las distintas variedades. Además, es un buen momento para, si tienes semillas de diferentes flores, pensar cómo vas a organizarlas para crear un bonito manto de colores cuando llegue el esperado momento de la floración. También es el momento de hacerse con las especificaciones de cada variedad: profundidad de siembra, la ubicación que requieren, el tiempo que tardan en germinar o la cantidad de riego que necesitan.
  2. Una vez claros todos estos puntos, debemos preparar la tierra para plantar nuestras semillas. En el caso de los jardines, lo primero es romper el suelo unos cuantos centímetros de profundidad para que este se airee y abonarlo con materia orgánica y fertilizantes para promover la descomposición y que el suelo esté listo para recibir las semillas. En el caso de que vayas a sembrar tus flores en una maceta o jardinera, el recipiente tiene que tener agujeros de drenaje, ya que la tierra mojada en exceso inhibirá el crecimiento de la semilla. Si los agujeros son muy grandes, cúbrelos con grava o una tela de alambre. Luego, llena la maceta con sustrato para macetas hasta alrededor de dos tercios de su capacidad.
  3. El siguiente paso es esparcir las semillas uniformemente por la superficie elegida y cubrirla con una pequeña capa de tierra. Las semillas para poder germinar no han de estar muy enterradas. Asimismo, es conveniente que no estén muy juntas. En el caso de macetas, lo ideal es sembrar un máximo de dos o tres semillas en cada una para que puedan tener espacio y crecer bien.
  4. Por último, ha llegado el momento de regar nuestra simiente por primera vez. Mantener la tierra o sustrato húmedo (pero nunca encharcado) facilitará el proceso de germinación.
  5. Una vez plantadas, lo único que tendrás que hacer es estar pendiente. Importante regar de manera habitual. Mantened la tierra húmeda pero sin mojar en exceso la parte aérea de la planta y/o flores, y evitad los encharcamientos. Un buen truco es hacer un mantillo de piedras o de paja sobre la tierra para mantener la humedad. También es recomendable antes de regar, tomarte el tiempo necesario para quitar las flores marchitas que pueda haber para así facilitar el nacimiento de nuevas flores.

¡Si cumplís todas las pautas que os damos, a buen seguro tendréis un precioso jardín, balcón o macetas que llenarán vuestro hogar de color y deliciosas fragancias!

En Eurogarden te ayudamos a cultivar el amor #DesdeLaSemilla.

Ya sólo nos queda recomendaros que poco a poco os vayáis haciendo con más semillas para jugar con las distintas formas y colores. Y, sobre todo, disfrutad en pareja del oasis de felicidad que será vuestro jardín cuando las flores hayan crecido y podáis crear vuestros propios ramos. Aquí os dejamos, la gran cantidad de variedades de flores que tenemos para que os hagáis con ellas.